Ampara oscuridad:

Pequeño niño ciego, te regalo mis ojos,

Estoy arto de ver este mundo horrendo,

Pero se que tu veras solo lo hermoso,

Sonríes y sufro, imaginarlo todo.

Y tu madre tan sonriente, llora ante los ojos esquivos de la gente,

Que por más que admira tú sonrisa solo te miran y no entienden,

Pequeño niño de lo hermoso, colores extraños en tu mente,

Y la señora de tu lado que te vio brotar desde su vientre.

Y para que quiero mis ojos, si hay tanta maldad,

Amigo niño, tu con tu inocencia podrás pintar,

Muchos colores y entre parques jugar,

Y yo podré partir viajando en mi ansiedad.

¡Así, si, así! cantabas al partir, la mirada limosnera

De la gente que viaja despectiva hacia ti,

“Pobresito niño” dicen, con tanto que ver que hay por aquí,

Mientras van gastando vidas, estático humano maniquí.

La oscuridad ampara tu inocencia,

Construir mas armas el trabajo de la ciencia,

Y tus ojos enclaustrados entre magia y cenicientas,

Imagina, sueña que la gente es cosa seria.

El declive de este mundo tan absurdo no te afectara,

Si no abres tus ojitos y no dejas de soñar,

Aun así quisiera darte mi vista y escucharte jugar,

Brincar, gritar, pelear, cantar…

Sube entre serpientes y escaleras al cielo,

Sentaras sobre una nube y podrás ver el mundo entero,

Entre algodones y centenos, y tu reír será eterno,

Niño, niño, se feliz con tu inocencia mientras yo muero.

Muero de impotencia al no poder darte mi mirada…

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